Obstruccion intestinal sintomas y signos
Factores de riesgo de obstrucción del intestino delgado
La enfermedad de Whipple afecta predominantemente a hombres blancos de 30 a 60 años de edad. Los pacientes afectados pueden tener defectos sutiles de la inmunidad mediada por células que predisponen a la infección por T. whipplei. De los pacientes con esta enfermedad, ¿aproximadamente qué porcentaje tiene un resultado positivo en la prueba HLA-B27?
La obstrucción intestinal es una alteración mecánica significativa o una detención completa del paso del contenido a través del intestino debido a una patología que provoca el bloqueo del intestino. Los síntomas incluyen dolor de tipo cólico, vómitos, obstipación y falta de flatos. El diagnóstico es clínico y se confirma con radiografías abdominales. El tratamiento es la reanimación con líquidos, la aspiración nasogástrica y, en la mayoría de los casos de obstrucción completa, la cirugía.
La obstrucción mecánica se divide en obstrucción del intestino delgado (incluido el duodeno) y obstrucción del intestino grueso. La obstrucción puede ser parcial o completa. Alrededor del 85% de las obstrucciones parciales del intestino delgado se resuelven con tratamiento no quirúrgico, mientras que alrededor del 85% de las obstrucciones completas del intestino delgado requieren cirugía.
Cómo aflojar una obstrucción intestinal en casa
La obstrucción intestinal, también conocida como obstrucción intestinal, es una obstrucción mecánica o funcional de los intestinos que impide el movimiento normal de los productos de la digestión[2][5] Tanto el intestino delgado como el intestino grueso pueden verse afectados[1] Los signos y síntomas incluyen dolor abdominal, vómitos, hinchazón y no expulsión de gases[1] La obstrucción mecánica es la causa de entre el 5 y el 15% de los casos de dolor abdominal intenso de aparición repentina que requieren ingreso en el hospital[1][2].
Las causas de la obstrucción intestinal incluyen adherencias, hernias, vólvulo, endometriosis, enfermedad inflamatoria intestinal, apendicitis, tumores, diverticulitis, intestino isquémico, tuberculosis e intususcepción. 1][2] Las obstrucciones del intestino delgado se deben con mayor frecuencia a adherencias y hernias, mientras que las obstrucciones del intestino grueso se deben con mayor frecuencia a tumores y vólvulos. 1][2] El diagnóstico puede hacerse con radiografías simples; sin embargo, la tomografía computarizada es más precisa. 1] La ecografía o la resonancia magnética pueden ayudar en el diagnóstico de niños o mujeres embarazadas.
La afección puede tratarse de forma conservadora o con cirugía.[2] Por lo general, se administran líquidos intravenosos, se coloca una sonda a través de la nariz hasta el estómago para descomprimir los intestinos y se administran analgésicos.[2] A menudo se administran antibióticos.[2] En la obstrucción del intestino delgado, alrededor del 25% requiere cirugía.[6] Las complicaciones pueden incluir sepsis, isquemia intestinal y perforación intestinal.[1]
Tipos de obstrucción intestinal
El diagnóstico de una fístula anorrectal se realiza mediante un examen clínico. Se pueden observar una o varias aberturas secundarias y, en ocasiones, se puede palpar un tracto cordal en la fístula. Sin embargo, si se sospecha que la causa de la fístula es la enfermedad de Crohn, ¿cuál de los siguientes estudios es el más apropiado?
La obstrucción intestinal es una alteración mecánica significativa o una detención completa del paso del contenido a través del intestino debido a una patología que provoca el bloqueo del intestino. Los síntomas son: dolor cólico, vómitos, obstipación y falta de flatos. El diagnóstico es clínico y se confirma mediante radiografías abdominales. El tratamiento es la reanimación con líquidos, la aspiración nasogástrica y, en la mayoría de los casos de obstrucción completa, la cirugía.
La obstrucción mecánica se divide en obstrucción del intestino delgado (incluido el duodeno) y obstrucción del intestino grueso. La obstrucción puede ser parcial o completa. Alrededor del 85% de las obstrucciones parciales del intestino delgado se resuelven con tratamiento no quirúrgico, mientras que alrededor del 85% de las obstrucciones completas del intestino delgado requieren cirugía.
Obstrucción intestinal parcial
La obstrucción intestinal, también conocida como obstrucción intestinal, es una obstrucción mecánica o funcional de los intestinos que impide el movimiento normal de los productos de la digestión[2][5] Puede afectar al intestino delgado o al intestino grueso[1] Los signos y síntomas incluyen dolor abdominal, vómitos, hinchazón y ausencia de gases[1] La obstrucción mecánica es la causa de entre el 5 y el 15% de los casos de dolor abdominal intenso de aparición repentina que requieren ingreso en el hospital[1][2].
Las causas de la obstrucción intestinal incluyen adherencias, hernias, vólvulo, endometriosis, enfermedad inflamatoria intestinal, apendicitis, tumores, diverticulitis, intestino isquémico, tuberculosis e intususcepción. 1][2] Las obstrucciones del intestino delgado se deben con mayor frecuencia a adherencias y hernias, mientras que las obstrucciones del intestino grueso se deben con mayor frecuencia a tumores y vólvulos. 1][2] El diagnóstico puede hacerse con radiografías simples; sin embargo, la tomografía computarizada es más precisa. 1] La ecografía o la resonancia magnética pueden ayudar en el diagnóstico de niños o mujeres embarazadas.
La afección puede tratarse de forma conservadora o con cirugía.[2] Por lo general, se administran líquidos intravenosos, se coloca una sonda a través de la nariz hasta el estómago para descomprimir los intestinos y se administran analgésicos.[2] A menudo se administran antibióticos.[2] En la obstrucción del intestino delgado, alrededor del 25% requiere cirugía.[6] Las complicaciones pueden incluir sepsis, isquemia intestinal y perforación intestinal.[1]